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Tres de los pesos pesados de la plantilla del Barça, Leo Messi, Luis Suárez y Gerard Piqué, además de Pepe Costa, encargado de la oficina de atención al jugador, mantuvieron una reunión improvisada en el aeropuerto de Sevilla, tras perder la final de la Copa del Rey ante el Valencia y antes de viajar de regreso a Barcelona, según una información desvelada por el diario 'As'.
Los tres jugadores del Barça analizaron las consecuencias de la derrota ante el Valencia y pasaron un balance de la temporada, conscientes de que el equipo necesita varios retoques.
El trayecto en autobús desde el Villamarín hasta el aeropuerto de Sevilla sirvió para que Suárez, Messi y Piqué, además de Costa, mantuvieran una intensa y larga conversación sobre el estado del equipo y las causas de la derrota tanto en la final de Copa como en Anfield.
De hecho, cuando sus compañeros ya habían bajado del autobús, Messi, Piqué, Suárez y Costa continuaron en la parte trasera del vehículo durante casi un cuarto de hora, para sorpresa del resto de la expedición.
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Ya en el viaje de regreso, el ambiente que se vivió en la expedición fue de un silencio casi absoluto: peor incluso que la atmósfera que se respiraba en el equipo al regreso de Anfield, donde el Barça sepultó todas sus opciones de ganar la Champions en otra noche aciaga.