Después de un arranque esperanzador, la luz de Memphis Depay se ha ido apagando. La marcha de Ronald Koeman, su principal valedor, fue un mazazo duro para el delantero. Tras disputar como titular y completos los cinco primeros partidos de la era Xavi, el de Moordrecht cayó lesionado. Lo cierto es que no aprovechó ese tramo inicial con el de Terrassa ya al frente para demostrar su valía.
Dos goles (uno de penalti) en 450 minutos y actuaciones más bien discretas ante Espanyol, Benfica, Villarreal, Betis y Bayern. Aun así, el internacional tulipán sigue siendo el máximo goleador oficial del FC Barcelona con ocho tantos.
EL PANORAMA HA CAMBIADO
Después de un mes en el dique seco, Memphis reapareció en Granada con más pena que gloria. Falto de ritmo aún, veremos si Xavi decide devolverle la titularidad ya en la Supercopa en el clásico, pero tras las buenas prestaciones del 'resucitado' Luuk de Jong la cosa no está nada clara. Eso si no contamos que aún se alberga la esperanza de que el recién llegado Ferran Torres pueda estrenarse (depende del COVID y de hacer hueco en la masa salarial). Aquí hay que añadir la previsible vuelta de Ansu y las irrupciones de Jutglà y Abde, claro.
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En cualquier caso, si con Koeman era titular intocable el neerlandés, el panorama se ha complicado sobremanera en este inicio de 2022.