Será por su forma de jugar, por qué los dos son de color o por qué los dos se formaron en Fluminense. Pero lo cierto es que a Marlon Santos en Brasil se le ha comparado a menudo con Thiago Silva. El defensa central del PSG es uno de los mejores en su posición y en Brasil afirman que desde su aparición, el fútbol brasileño no había dado un central de tanta calidad. Hasta que llegó Marlon Santos.
Marlon nació el 7 de septiembre de 1995 en la localidad de Duque de Caxias. Comenzó a jugar como pivote hasta que con 17 años, en un torneo que Fluminense jugó en Alemania, se lesionó uno de los centrales y él ocupó su plaza. Ya no se ha movido más de esa posición. Los que le conocen, hablan de él como un defensa técnico y rápido. Con su 1,82 de altura no va mal por arriba. Tiene un buen sentido de la anticipación y sabe sacar el balón desde atrás controlado. Además, en un aspecto recuerda a Carles Puyol: Como el gran ex capitán azulgrana, destaca por cometer muy pocas faltas.
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Central diestro, la pasada temporada estuvo en el primer equipo del Fluminense, pero se vio relegado a menudo a la suplencia. A pesar de ello, el Barça ya llevaba un tiempo fijándose en él y decidió incorporarlo para el Barça B. Estuvo con el primer equipo en el stage de Inglaterra y sorprendió agradablemente a Luis Enrique. Eso puede explicar que se haya decidido a probarle de titular ante el Leicester.