Luis Suárez ha demostrado que a un delantero centro de su categoría, a veces, le hacen falta muy pocas ocasiones para ser determinante y fundamental en el resultado final de un partido. El uruguayo, que estaba teniendo muchas dificultades para imponerse a la imponente pareja de centrales del Valencia -Mangala y Garay- fue capaz de empatar un partido que se le había puesto muy cuesta arriba al Barça y, encima, en el último suspiro del duelo, ya en el añadido, provocar el penalty que acabaría dándole al conjunto azulgrana los tres puntos.
Suárez, con indisimulada satisfacción, se felicitó por la trabajada victoria: "Este triunfo nos va a dar más tranquilidad todavía para seguir creyendo en nosotros. Sin duda fue un partido muy difícil, algo que ya sabíamos porque el Valencia siempre nos ha apretado mucho en su estadio". Sobre la victoria, y como se consiguió, el charrúa cree que "hemos demostrado quienes somos y lo que hacemos en el terreno de juego. Nuestra ambición nos llevó a la victoria, porque ni nos vinimos abajo con el segundo gol del Valencia ni nos conformamos con el empate. Nosotros siempre queremos ganar y lo hemos demostrado en Valencia"