Luis Suárez cerró 2019 con un gran partido. El delantero uruguayo marcó un gol en el Barça-Alavés (4-1) de este sábado en el Camp Nou, dio dos asistencias y combinó con Messi en la jugada del 3-1.
El ariete del conjunto azulgrana asistió a Griezmann en el minuto 14 para que el francés abriera el marcador. Y en la última jugada del primer tiempo, minuto 45, volvió a dar una asistencia para que Arturo Vidal estableciera el 2-0 tras un potente trallazo.
En el segundo tiempo Suárez siguió batallando como siempre, abriendo espacios, bajando balones y combinando, en muchas ocasiones de espaldas a la portería para dejar pasillos a sus compañeros de segunda línea.
Decisivo
Suárez, igualmente, intervino en el 3-1, obra de Leo Messi tras un letal zurdazo desde fuera del área. Fue él quien combinó con su amigo y vecino para que el argentino fabricara el tercero. Un golazo.
Esta generosidad para con sus compañeros merecía el premio del gol y Suárez lo tuvo en el minuto 75, al transformar un penalti que le cedió Messi, otro jugador que prioriza los éxitos colectivos a los individuales.
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Suárez, que suma 13 goles (10 en Liga y 3 en Champions League), acabó siendo sustituido por Carles Pérez. Camino a la banda se llevó la ovación de las gradas, muy merecido.