La Catedral y el Athletic no son propicios para grandes cambios. Así lo ha entendido Luis Enrique que se ha decantado por un once inicial de lo más clásico para medirse al conjunto de Valverde. El único relevo era obligado: Ter Stegen ya estará bajo palos tras la marcha de Claudio Bravo al Manchester City.
En defensa, el técnico asturiano también se ha mostrado partidario de dar continuidad al bloque. Pese al alta médica de Mascherano, será Umtiti quien formará pareja en el eje de la zaga junto a Piqué. Por supuesto, Sergi Roberto se mantiene en el lateral derecho mientras que Jordi Alba repite en banda izquierda.
Del centro del campo hacia arriba, todo en orden. Con el portugués André Gomes de inicio en el banquillo, será Denis Suárez quien seguirá ocupando la vacante del lesionado Andrés Iniesta.
Y en ataque, Luis Enrique espera que Arda Turan siga en estado de gracia y a la altura de sus dos compañeros de lujo en los metros finales: Luis Suárez y Messi.
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Un once sin margen para la especulación. Y es que antes del parón liguero por causas de las selecciones, no se intuía rotación posible.