Si Jordi Alba no ha entrenado este martes no ha sido por molestias físicas como ha trascendido las últimas horas, sino por unos intensos dolores de barriga que le han hecho pasar una noche de perros. El cuarto capitán del FC Barcelona no ha podido participar en la sesión de activación de esta mañana en la Ciutat Joan Gamper y su concurso frente al Bayern de Munich tenía muy mala pinta.
Pero Ronald Koeman, ante la plaga de bajas que azota a la plantilla culé, ha pedido al lateral de L'Hospitalet que, dentro de una lógica, forzara para salir de inicio. Con Sergiño Dest lesionado, Ronald ha tenido que alinear a Sergi Roberto de carrilero diestro y en el costado izquierdo solo tenía la opción de Mingueza, pero era exponer mucho al chaval en un duelo de tanta exigencia y en una posición bastante antinatural.
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Alba ha accedido, demostrando su compromiso con el club (cabe recordar que ya firmó la rebaja de sueldo), más ahora que forma parte del grupo de capitanes. De esta forma, a pesar de no estar al 100%, Alba ha saltado al césped del Camp Nou desde el primer minuto.