El equipo ganaría aquella Liga dejándose poquísimos puntos en el camino y Cruyff se convirtió en un auténtico ídolo. El estilo de la escuela holandesa encajó en el Barça como anillo al dedo y la herencia de ese fútbol es la que hoy vemos en las botas de los Xavi, Iniesta, Messi y compañía.
Tras jugar cinco temporadas en el club, regresaría años más tarde, ya como entrenador, para ayudar a conseguir entre otros títulos, la primera Copa de Europa del club en 1992.
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Queremos rendir un homenaje al mítico ex jugador y ex técnico que tantas alegrías dio al barcelonismo. A través de Twitter y siguiendo con la idea de Javier Bossio, queremos que el hashtag #graciasCruyff llegue lejos en este día tan especial.