Por si no hubiera levantado suficiente polvareda la situación de Antoine Griezmann tras darle entrada Setién en el 90' frente al Atlético de Madrid, el culebrón parece que está lejos de acabarse. Tras acumular dos suplencias consecutivas, el técnico cántabro decidió gastar su último cambio con la salida del galo, que no olvidemos costó el verano pasado 120 millones de euros.
Algo que, por lo menos a su familia, no le ha sentado nada bien. Su hermano y, sobre todo, su padre han criticado duramente lo que consideran un desaire y una falta de respeto del entrenador azulgrana sobre el internacional francés. “Para hacer este tipo de declaraciones, deberías tener las llaves del camión. No es el caso, porque eres pasajero”, ha comentado en Instagram el progenitor de Antoine después de las palabras de Setién asegurando que no pensaba pedirle disculpas.
Pues bien, la reacción del propio Griezmann no se ha hecho esperar. Ha sido en forma de imagen y con carcajadas, múltiples. Antoine ha colgado en sus redes una foto con su pareja en la que salen riendo y la ha acompañado con dos iconos de risa. Interpreten lo que quieran...
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