El Barça necesita, casi más que nunca, compromiso y actitud para salir de una situación de lo más complicada y preocupante a nivel deportivo.
Con dos derrotas consecutivas ante Cádiz y Juventus, y sin recuperar aún las sensaciones en cuanto a juego, el Levante aguantó los primeros 45 minutos en el Camp Nou con el resultado de cero a cero, e incluso tuvo oportunidades para poder adelantarse al FC Barcelona.
Uno de los señalados de la primera mitad fueron Antoine Griezmann, quién, pese a disponer de algunas ocasiones de cara a puerta, no llegó a encontrar su sitio en el terreno de juego y a aportar lo que el equipo necesitaba.
Durante el descanso, en cambio, las críticas a Griezmann, sobre todo en redes sociales, se maximizaron por una imagen que protagonizó ante las cámaras de Movistar en el túnel de vestuarios antes de saltar al terreno de juego.
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Con los jugadores del Barça animándose para afrontar los segundos 45 minutos, bajando por las escaleras del túnel del Camp Nou, Griezmann se paró delante de las cámaras y dedicó a hacerle muecas, en teoría, en tono jocoso, pero que no sentaron bien a la afición, que criticó la falta de concentración del francés en un partido que se le escapaba de nuevo al Barça en ese momento.