Igual que sucedió hace unas semanas en la Copa del Rey, el Espanyol puso en serios problemas al Barça de Valverde en Cornellà-El Prat. Si en la competición copera el conjunto blanquiazul fue capaz de derrotar al Barça en su campo, en LaLiga los azulgranas se libraron de hacerlo gracias a un gol de Piqué en la recta final del choque, que igualó el tanto inicial de Gerard Moreno.
Césped impracticable, mucha tensión y pocas ocasiones
En un césped impracticable, por las intensas lluvias que cayeron en el estadio del Espanyol, el conjunto blanquiazul fue capaz de aprovechar una de las pocas ocasiones que tuvo en el partido para adelantarse en el marcador gracias a Gerard Moreno, que cabeceó de manera impecable un centro preciso de Sergio García en el minuto 66.
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El Barça, que hasta ese momento había tenido su mejor ocasión en las botas de Philippe Coutinho -que estrelló el balón en el larguero en el minuto 21 de la primera mitad-, logró igualar el choque en la recta final. Fue Gerard Piqué, en otro cabezazo tras una falta servida desde el lateral, quien puso en el marcador el definitivo empate a uno.