En el mundo del fútbol, en el que los millones se mueven de lado a lado y los intereses económicos van dos pasos por delante de cualquier decisión que se tome, las casualidades no existen. Y, cuando aparecen, suelen ser provocadas. Todo acaba teniendo un sentido, una razón de ser. Y el viaje de Matthijs de Ligt a Turín para recoger el ‘Golden Boy’ no escapa de la lógica que manda en este deporte.
Por eso en el Barça andan con la mosca detrás de la oreja. El central del Ajax es uno de los objetivos del club blaugrana de cara a la próxima temporada, pero sabe que tiene competencia muy seria y es consciente de que todo lo que ocurra hasta la decisión definitiva, si es que no está tomada, cuenta. La Juventus es uno de los clubs que más está apostando por el joven defensa holandés, cuyo representante es Mino Raiola, con quien el club de Turín ha realizado grandes operaciones, como la que en su día fue la más cara de la historia, el traspaso de Pogba al Manchester United.
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En ese sentido, existe la sospecha de que la elección de De Ligt como ganador del ‘Golden Boy’ que entrega cada año ‘Tuttosport’ al mejor futbolista joven responde a intereses que van más allá de lo estrictamente mediático. De hecho, ‘Tuttosport’ tiene su sede central en Turín, lo que alimenta las especulaciones alrededor de la entrega del galardón al central del Ajax. En la dirección deportiva creen que este medio de comunicación podría haber echado una mano a la Juventus decantándose por De Ligt con el objetivo de seducir al futbolista, que se desplazó hasta la ciudad italiana para recogerlo. Que Mino Raiola sea quien lleva las riendas del jugador tampoco enfría las sospechas que le relacionan con la ‘Vecchia Signora’, que parece estar en la primera posición de la carrera por firmar a Matthijs.