Durante la semana se había cuestionado el rendimiento de Leo Messi en Cornellà-El Prat. Al delantero del FC Barcelona no se le había dado bien el estadio del Espanyol.
Solo había anotado dos tantos en diez partidos y encadenaba tres campañas sin ver puerta en casa del eterno rival.
Messi tenía todo un reto por delante y, como es habitual en él, lo pulverizó. El argentino provocó una falta en la frontal del área y la ejecutó con una maestría que no deja de asombrar por muchas veces que lo repita.
El delantero del FC Barcelona colocó el balón por toda la escuadra con un efecto endiablado que hizo inútil la estiarada de Diego López.
El tanto rompió la igualdad existente hasta ese momento y situó a Messi como el futbolista que más goles le ha marcado al Espanyol en la Liga.
El argentino sumó su tanto 19, superando a Thelmo Zarra e Isidro Langa, que firmaron 18 dianas defendiendo la camiseta del Athletic y el Oviedo, respecticamente.
Messi se sitúa, con diez goles, a tan solo uno del delantero del Girona Cristhian Stuani en la lucha por el Pichichi.