Después de jugar el clásico con molestias y estar ausente en los dos últimos encuentros por lesión, Frenkie de Jong ha regresado hoy al equipo para jugar la final de Kiev. El neerlandés ha sido titular, pero en la primera parte ha seguido ausente, pasando bastante desapercibido.
Jugando como interior por la izquierda con Jordi Alba y Ansu Fati cerca de su posición, apenas se ha atrevido De Jong a buscar el área rival. Ni una buena conducción, ni un pase de riesgo buscando una buena opción para los delanteros. Un par de llegadas desde atrás sin suerte y poca cosa más de un jugador del que se espera mucho más y que no está cuajando una buena temporada. No ha llegado a rematar en el minuto nueve una jugada un tanto embarullada en el interior del área y ha corrido bien el contragolpe cuando se llegaba al descanso, pero no ha podido aprovechar un buen centro de Memphis porque se ha avanzado al balón.
Jugando más avanzado para presionar la salida de balón del rival, como gusta a Sergi y era hace un tiempo marca de la casa, ha buscado pisar el área del Dinamo de Kiev para aprovechar uno de los incontables centros que han puesto los blaugrana. No ha podido rematar ninguno porque muchas veces no eran buenos y otras eran repelidos por los defensas locales. Ha visto de cerca, eso sí, el gol salvador de Ansu Fati, que ha llegado después de un centro de Mingueza desde la derecha.
CRECE PARA CONSERVAR
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Precisamente a partir del gol del Barça se ha visto al mejor De Jong, que ha crecido en la fase final del partido. Cuando los blaugrana han optado por controlar el balón y tener largas posesiones para dormir al rival ha aparecido la mejor versión del neerlandés. De Jong ha retrasado su posición, el Barça ha apostado por aquello que tan bien sabía hacer, defenderse con el balón y el neerlandés ha sido una pieza importante para conseguirlo. Aunque con alguna pequeña imprecisión, siempre cerca de Sergio Busquets, se ha ofrecido a sus compañeros y el equipo ha sido capaz de mantener el resultado y conseguir su primera victoria fuera de casa en lo que va de temporada. Un paso adelante del Barça mientras se sigue esperando a Xavi Hernández. Frenkie de Jong también debe crecer con el paso de los partidos y la llegada del técnico de Terrassa.