El Barcelona renuncia a su principal baza negociadora con el PSG para intentar repatriar a Neymar: que el crack brasileño, de forma unilateral, se acoja al artículo 17 del Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores para que la FIFA determine una compensación económica, que rondaría los 180 millones de euros.
El Covid19, y sus catastróficas consecuencias en las arcas de los clubes de fútbol, ha impactado radicalmente en el escenario de la segunda temporada del ‘caso Neymar’.
El Barcelona considera ahora que la ‘vía FIFA’ puede tener un efecto boomerang para sus intereses. Por este motivo, le ha pedido a Neymar que se olvide de recurrir al artículo 17.
LA ESTRATEGIA PARA EL FICHAJE DE NEYMAR
El Barça está replanteándose sus estrategias de cara a un mercado en que tendrá que reforzarse para mejorar las prestaciones de la plantilla, pero en que actuará con contención económica por la reducción de sus ingresos.
El club aboga por la austeridad. Tiene decidido presentar un ERTE y se está negociando una reducción salarial con la primera plantilla de un 70% durante el período en que se extienda el confinamiento por el Covid19.
En estos momentos, la dirección de la entidad no quiere mantener abierta la posibilidad de una operación que requerirá un pago en agosto de unos 180 millones de euros. El ‘refichaje’ de Ney podría ahondar el distanciamiento entre la plantilla y la junta y podría causar turbulencias en un vestuario en que hay puntos de vista diferentes sobre la propuesta del club de reducirles drásticamente la ficha.
La vía de la FIFA es hipotecarse todo el verano, ya que su resolución, que acabaría seguramente en la Corte Arbitral del Deporte (CAS), sería de obligatorio cumplimiento y maniataría al Barcelona en otros frentes.
Que Neymar renuncie al artículo 17, no significa que el Barça se vaya a olvidar del astro brasileño. Su llegada, sin embargo, tendrá que pasar obligatoriamente por una mesa de negociación con el PSG, donde, la parte blaugrana se sentarán vetando cualquier pago integral del traspaso al contado. El acuerdo tendría que materializarse en un pago fraccionado o por incluir futbolistas en la operación, uno de ellos no está descartado que pudiera ser Antoine Griezmann.
Paralelamente, el Barça no quiere dar una imagen de falsa opulencia con un fichaje multimillonario cuando el planeta está sufriendo con una pandemia que está colapsando los sistemas sanitarios de muchos países y que también va a empobrecer el mundo en su globalidad. El Barça saldrá al mercado y fichará, pero no con sumas que generen rechazo social.
UN CAMBIO DE LA HOJA DE RUTA
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Los intereses del Barça y Neymar convergen, una vez más. Y para que su vuelta al Camp Nou se materialice habrá que mantener una estrategia conjunta, como ya ocurrió durante el verano pasado. El tener que renunciar a la vía de la FIFA por motivo financieros (el Barça dribla el pago al contado de 180 kilos), no cambia las intenciones de ambas partes. Reanudándose o no las competiciones, ganando o no la Champions, Ney considera que su etapa en París ha finalizado y se mantiene firme en su idea de irse. No renovará y forzará todo lo que sea posible, para que haya un acuerdo de traspaso entre los dos clubes.