Gavi mete la cabeza donde otros retiran el pie. Y debe medir sus entradas. Lo curioso es el trato que recibe.
Si pega con España, aplauso. Si pega con el Barça, campañita.
Sí, Gavi rasca. Como Casemiro, Gabi o Davids. Sí, los buenos también rascan.
NOTICIAS RELACIONADAS
Xavi ironizó: “¿Esto viene de los creadores del 'Villarato' ese y también del doping?”. Justo. Bingo.