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Leo Messi conmemoró su victoria 500 como jugador del FC Barcelona con un doblete en la goleada ante el Leganés (5-0) que certifica la clasificación del equipo barcelonista para los cuartos de final de la Copa del Rey.
Los goles del argentino no fueron en esta ocasión decisivos. El '10' apareció cuando el Barça ya tenía la eliminatoria encarrilada con los goles de Antoine Griezmann y Clément Lenglet.
En el 3-0 culminó una jugada individual con un disparo que rebotó en Rodrigo Tarín para despistar a Pichu Cuellar. En el 5-0, convirtió una cesión de Rakitic.
Los registros de Messi son asombrosos, porque ha logrado esas 500 victorias en 710 partidos oficiales. El porcentaje aumenta en el Camp Nou, tal y como explicó esta semana nuestro compañero David Salinas en un excelente reportaje: 285 victorias en 3457 partidos.
El argentino se sacó la espina de la derrota en Mestalla, contra el Valencia, donde disparó hasta en once ocasiones a portería sin premio.
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Su próximo reto es la visita del Levante al Camp Nou el domingo, en el que puede sumar su victoria 200 en LaLiga Santander en casa.