Chistophe Dugarry estuvo solo cuatro meses en Barcelona y pese al poco tiempo en el que estuvo en el Camp Nou tiene motivos para recordar dos de las mejores anécdotas que le han pasado en su carrera deportiva.
Fue en el verano de 96 cuando aterrizó en el equipo de Van Gaal procedente del Milan donde había jugado sin pena ni gloria durante una temporada. Dugarry llegó como antes lo habían hecho Patrick Kluivert, Reiziger o Bogarde, todos ellos procedentes del equipo italiano. Dugarry llegó en ese mismo tren.
Cuestionado en una entrevista a 'L’Equipe' por el mayor incidente jamás vivido en un vestuario, Dugarrry se refirió a uno que vio con sus propios ojos en el vestuario azulgrana: “Fue el protagonizado por Van Gaal y Stoichkov cuando yo estaba en el Barcelona. Van Gaal quería que Stoichkov jugara de una manera determinada pero Hristo no quería hacerlo. Porque él se llamaba Stoichkov, porque él había ganado el Balón de Oro (1994) y porque nadie tenía que enseñarle nada a esas alturas de su carrera. Y fue entonces cuando él empezó a insultar a Van Gaal. Nunca había vivido algo similar. Me impactó”.
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Cuando se refirió al momento en el que se sintió más animal dentro de un vestuario, más bestia, Dugarry hace referencia a otro vivido también en su etapa en el Barcelona. “Estaba aún en el Barcelona. Antes de empezar un entrenamiento, estábamos lanzando balones para superar la barrera de muñecos, como quien ensaya faltas. En esas, Van Gaal pasó por las inmediaciones, por ahí cerca, y yo le tiré la pelota en plena cara. La clavé. Pero realmente en toda la cara. Aún ahora se me aparece la cara enrojecida de Van Gaal de ese día. Toda la prensa estaba allí delante… Si hasta ese momento nuestra relación ya era fría, a partir de entonces entendí que era el inicio de mi final en el Barcelona”.