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El FC Barcelona se despidió anoche de la Liga y las explosivas declaraciones de Leo Messi tras el encuentro que sentenció a los azulgranas ante Osasuna (1-2) señalaron a Quique Setién, poniendo en duda su continuidad al frente del banquillo. En plena crisis, el técnico cántabro se reunirá hoy con el presidente Josep María Bartomeu.
Bartomeu fue testigo de la debacle del Barça en eñ Camp Nou desde el palco y un día después quiere conocer de primera mano las sensaciones de Setién , sobre todo teniendo en cuenta que faltan tres semanas para el decisivo partido de vuelta de octavos de final de la Champions League ante el Nápoles en el Camp Nou.
"Vamos a tener que cambiar muchísimo porque si no el partido ante el Nápoles, lo vamos a perder también", dijo abiertamente Messi tras el KO ante Osasuna. Antes de la pandemia, el Barça logró un positivo resultado en su visita a Italia (1-1), pero desde entonces, el conjunto azulgrana ha empeorado y la derrota en la Liga, después de haber conquistado las dos últimas, es un doloroso golpe a la moral de los jugadores.
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Setién, con contrato en vigor hasta 2022, no fue muy claro cuando anoche le preguntaron por si estaría en el banquillo ante el Nápoles: "No lo sé, espero”, dijo. Josep Maria Bartomeu ya almorzó en casa del técnico semanas atrás, pero se prevee que el tono de la cumbre de esta tarde será muy diferente, si bien pocos apuntan a una destitución inminente.