Isaac Cuenca fue el jugador más feliz de la noche. El reusense debutó ante el Viktoria Pilsen en Liga de Campeones y reconoció sentirse "muy feliz y muy contento por lo rápido que está sucediendo todo".
"Puedo aportar muchas ganas, ilusión y alegría a este equipo", afirmó el delantero, que en un año ha pasado de ser uno de los artífices del ascenso del Sabadell a Segunda División, donde jugaba cedido, a actuar en un partido de la máxima competición continental.
Sus compañeros celebraron su inclusión en el equipo e incluso Víctor Valdés publicó una imagen junto a él en Facebook para felicitarle por su debut.
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Se trata del 18º futbolista surgido de las categorías inferiores que se estrena oficialmente con el primer equipo desde que Pep Guardiola es el entrenador.