El hasta ahora central del Chelsea, Andreas Christensen, ya ha firmado su contrato como jugador del Barça. Hasta 2026 y con una cláusula de 500 millones de euros, el jugador llega para reforzar el centro de la zaga ante la salida inminente de Lenglet y Umtiti.
El danés, que ha sido una pieza fundamental en la pizarra de Thomas Tuchel en Londres, ha posado junto al presidente del club, Joan Laporta, sobre el césped de la Ciutat Esportiva Joan Gamper, donde ha dado sus primeros toques y se ha vestido de corto.
El ex del Borussia Mönchengladbach ha cerrado su etapa en Stamford Bridge con un total de 160 encuentros oficiales disputados entre todas las competiciones, donde ha anotado dos tantos y ha repartido otras dos asistencias. Ha conquistado una Champions League, además de una Supercopa de Europa, un Mundial de Clubes, una FA Cup y una EFL Cup.
¿Qué puede aportar en la pizarra de Xavi?
Christensen aterriza para elevar el techo competitivo del equipo en la retaguardia y facilitar la salida de jugadores que no tienen la confianza del técnico: Umtiti y Lenglet. A priori, no llega para ser titular, puesto que hay fe ciega en Araujo, Piqué y Eric Garcia.
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Como cuarto activo de rotación, el internacional con Dinamarca le dará un plus a la salida del balón, además de cierto empaque en el centro de la zaga. Su gran posicionamiento y lectura del juego le avalan como un refuerzo interesante para los planes del egarense.