Las informaciones del caso Negreira se multiplican a un ritmo endiablado, hasta el punto de que resulta complicado discernir entre lo real y lo que no es.
Es el caso de una información aparecida en las últimas horas según la cual el Barcelona, gracias al acuerdo con Enríquez Negreira, tuvo información privilegiada sobre la elección del colegiado que iba a pitar la final de Copa del Rey de 2017-18 que el Barcelona disputaba contra el Alavés.
Según esta versión, Negreira avisó al Barcelona que era Clos Gómez quien iba a ser el encargado de arbitrar el encuentro. "Será Clos Gómez, 99%" le dijo Albert Soler tres meses antes de la disputa del partido.
Una tradición
El caso es de risa pues hay y había una tradición que el árbitro que se retiraba pitaba la final de la Copa del Rey. Clos se retiró esa temporada y su último parido fue aquella final. No es una información privilegiada sino que es algo sabido en el mundo del fútbol.
El encuentro se disputó el 27 de mayo en el Estadio Vicente Calderón de Madrid y acabó con victoria del equipo blaugrana por 3-1.
Según las informaciones que provienen de un portal de web de Madrid indican que "el mensaje demostraría que el Barcelona utilizó a Negreira ya su hijo por tener acceso a información privilegiada sobre el estamento arbitral y ahora las sospechas de la Fiscalía, que sostiene en su querella contra el Barcelona y los expresidentes Josep Maria Bartomeu y Sandro Rosell que los más de siete millones de euros pagados por la entidad al ex vicepresidente de la CTA tenía como objetivo conseguir "actuaciones tendentes a favorecer al Barcelona en la toma de decisiones de los árbitros" y en las "designaciones para cada partido".