El debut de Kevin-Prince Boateng con el FC Barcelona no fue el soñado por el delantero ghanés. Empezó el duelo contra el Sevilla (2-0) en el equipo titular, un día después de que fuera presentado como nuevo jugador azulgrana y disputó 63 minutos, pero no mostró sus credenciales de rematador.
Boateng fue la gran sorpresa de Ernesto Valverde para afrontar el primer partido de cuartos de final contra el Sevilla. El nuevo fichaje del Barça se alineó junto a Malcom por banda derecha y Aleñá por banda izquierda.
Jugó casi siempre al primer toque, sin complicarse la vida, devolviendo el balón en condiciones. Fue la referencia del equipo en ataque, bajando balones para los compañeros que venía por detrás, pero tuvo poca incidencia en el juego. También buscó desmarques al espacio pero estuvo sujetado bien en todo momento por el central Kjaer.
'Desaparecido' entre el 30' y el 45'
Estuvo activo hasta la media hora de partido y 'desaparecido' el último cuarto de hora del primer tiempo, en que no intervino. En la segunda mitad le pitaron una falta sobre Sergi Gómez, hizo un mal control en la jugada siguiente y pidió penalti por manos de Sergi Gómez en el minuto 50, después de caer junto al otro central.
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En el 51 recibió una falta de Kjaer y, poco después, fue sustituido por Luis Suárez, con 1-0 en el marcador (desde el minuto 58). Se le pudo exigir un poco más, especialmente en el remate, uno siendo generosos. En cuanto a trabajo, nada que reprocharle. Está obligado a ir a más en los próximos partidos.