Nada más acabar el partido Granada-FC Barcelona que acabó con victoria azulgrana por 0-3 (los tres de Luis Suárez), los futbolistas del equipo azulgrana que no estaban en el campo saltaron rápidamente a por sus compañeros para intentar celebrar el título de liga, el 24ª del Barça y el primero que se consigue en tierras andaluzas.
Nada más formarse la piña y en pleno momento de euforia, el público presente en las gradas del Nuevo Los Cármenes empezó a saltar al terreno de juego y se produjo una invasión de campo que frustró la celebración de los azulgranas, que se vieron obligados a meterse en el túnel de vestuarios ante la locura generada sobre el terreno de juego.
Por suerte ningún futbolista azulgrana tuvo que lamentar ningún tipo de lesión, aunque la imagen que se vio en Granada dejó mucho que desear. Los cuerpos de seguridad reaccionaron tarde, pero consiguieron dirigir la salida del campo de los jugadores y luego crearon un cordón de seguridad que impidiera el acceso a vestuarios, donde continuó la fiesta del Barça. Esta vez, sin interrupciones.
Locura sobre el césped
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En el campo la afición local no se movió del césped y se vivieron momentos tensos entre la gente que intentaba entrar en el vestuario y los cuerpos de seguridad, lo que llegó a provocar un enfrentamiento entre un auxiliar de campo y un aficionado. Mientras algunos seguidores celebraban tanto el título de liga del Barça como la permanencia de los locales, otros se dedicaban a subirse a las porterías y arrancar trozos de césped.