En un equipo muy coral y en el que pocas individualidades sobresalen, hay una figura, la del japonés Take Cubo, que está centrando los focos. Cedido por el Real Madrid esta temporada, el nipón estuvo en las categorías inferiores del Barça durante tres años y medio y tuvo que regresar a su país por la sanción que la FIFA impuso al club azulgrana por los fichajes de menores. El verano pasado el Madrid confirmó su incorporación por dos millones.
“Sí, creo que el Barça la ‘cagó’ dejando escapar a Take, es un jugadorazo. La verdad que estaba muy bien y ha venido incluso mejor del confinamiento, creo que le ha ido bien, se ha puesto hasta fuerte. Es un fenómeno, para mí tiene unas cualidades increíbles, está ayudando mucho al equipo; como persona no hay nada que achacarle, es un fenómeno y ojalá que acabe siendo una figura porque tiene muy buena pinta y aptitudes para triunfar las tiene todas”.
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El nipón acumula este curso 24 partidos oficiales en los que ha anotado tres goles y dado tres asistencias. Le costó a Vicente Moreno apostar por él, pero lo cierto es que antes del parón se había consolidado ya en el once. Ojo frente al Barça porque es uno de los futbolistas a seguir.