El futuro de Frenkie de Jong se dirimirá en las próximas horas. Todo está pendiente de una última cumbre entre el agente del jugador y el Barça para estudiar todas las posibilidades que hay encima de la mesa.
Pero lo que tiene claro el Barça es que no le puede pagar el actual salario pactado en las última renovación y que se iría por encima de los 22 millones de euros entre fijos y variables. El club blaugrana ya le ha dejado claro que quieren que se quede pero le proponen una rebaja de salario de casi un cincuenta por ciento o de lo contrario le abrirán la puerta para que acepte una de las ofertas que tiene para jugar en la Premier. No se contempla que siga con el actual contrato aunque el holandés tiene la sartén por el mango y, legalmente, podría decidir quedarse sin rebaja.
La tensión entre las dos partes es máxima desde que el Barça envió por escrito al jugador y a su entorno que consideraban ilegal su contrato de renovación. A partir de ahí, la relación quedó deteriorada y al futbolista le quedó claro que el club blaugrana iniciaba una estrategia para empujarle a salir, algo que nunca ha contemplado como prioridad. Tanto el presidente del Barça, Joan Laporta, como el técnico, Xavi Hernández, le han reiterado que cuentan con él pero que debe ayudar al club en estos momentos. Y todo pasa porque acepte esta potente rebaja salarial o su futuro quedará comprometido.
El entorno de De Jong no quiere ni hablar sobre esta propuesta de rebaja. No están de acuerdo porque el holandés hizo un esfuerzo importantísimo la pasada temporada cobrando la mitad de lo que le tocaba a causa de la crisis económica por la pandemia. Consideran que ahora recuperan el dinero perdido y no entienden cómo se le puede escatimar ese salario cuando el Barça ha realizado operaciones de fichajes por encima de los 150 millones de euros.
La clave de toda la cuestión es qué pasará si De Jong no acepta la rebaja. El Barça ha agilizado las negociaciones con el Chelsea para llegar a un acuerdo de traspaso con el futbolista y espera que De Jong tome la decisión de salir y acepte llegar a un acuerdo con el club londinense o con el Manchester United. En el club blaugrana ya tienen claro que, tras los refuerzos realizados, la baja del holandés no sería crítica y la operación de venta sería un espaldarazo a las cuentas de la entidad. Se ahorrarían una ficha potente y cobrarían un traspaso superior a los 80 millones de euros.
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El sueño de Laporta es que De Jong acepte hacer este esfuerzo económico y se quede e ir a por todas a por Bernardo Silva para completar una de las mejores plantillas del fútbol europeo. En el club blaugrana lo ven difícil, pero posible, aunque es evidente que el fichaje del portugués sería mucho más sencillo si De Jong acepta salir. Mientras tanto, Chelsea y United están apretando al entorno del jugador con ofertas que sí respetarían el salario millonario actual sin rebaja alguna. Los agentes tienen claro que sería una gran oportunidad, pero De Jong está cómodo en Barcelona y su sueño siempre fue jugar en el Camp Nou. O acepta la rebaja o sale.