Ahora sí, cuatro años y medio después, Neymar reconoce públicamente en un documental que quería marcharse del PSG.
¿Se acuerdan de cuando el Barça le pedía entonces que se posicionara en público para acelerar la operación? A toro pasado, cuando aquello ya es historia, Neymar hace lo tradicional: Se moja solo cuando ya no arriesga nada. Quiso que el Barça le hiciera todo el trabajo sucio para él poder nada siempre en las dos aguas. Retratado queda.