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Los 51.645 espectadores que acudieron al Camp Nou para presenciar el encuentro entre el Barcelona y el Eibar correspondiente a la quinta jornada de Liga es una de las entradas más pobres que se recuerdan.
La peor entrada en Liga que se recuerdan debe remontarse a la temporada 2008-09 en un Barcelona-Numancia en la que el Camp Nou acogió a 47.330 espectadores. Eso ocurrió un 24 de enero de 2009.
Las peores entradas que se recuerdan en el Camp Nou son habitualmente en partidos de Copa del Rey, aunque desde que la primera ronda fue calificada como el día del soci las entradas han aumentado sensiblemente. Así pues, se recuerda un Barcelona - Sevilla (octavos de final ida de la temporada 2010-11) en la que hubo 48.167 espectadores.
La peor entrada más reciente en todas las competiciones conjuntas se remonta al 6 de diciembre de 2011 en un Barcelona-Bate Borisov con 37.374 espectadores.
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Por último, la peor entrada que jamás ha registrado un partido del Barcelona en el Camp Nou se remonta a la temporada 2008-09 en la que en un partido entre el equipo de Guardiola y el Shakthar Donesk solo había 22.763 espectadores.