La Premier League aprieta muchísimo por Vitor Roque. Como ya era de esperar, al Barça le ha aparecido una competencia durísima que viene desde Londres. El Arsenal, que es el equipo de moda en Inglaterra, y el Chelsea, que es el gran animador del mercado, se han lanzado a por el delantero brasileño que la secretaría técnica tiene en cartera para este próximo verano.
Ante este escenario tan hostil, al Barcelona solo le queda apelar a la voluntad del futbolista a vestirse de blaugrana. Sin la complicidad de Vitor Roque y su entorno familiar y profesional será imposible que esta operación llegue a buen puerto.Es la misma situación que se vivió un año con Raphinha, cuando su club llegó a un principio de acuerdo para traspasarlo al Chelsea y el extremo gaucho se cerró en banda y esperó al Barcelona hasta el final.Con Vitor Roque todo es más complicado desde el punto de vista financiero. El Barça puede necesitar posponer un año el inicio de los pagos (se retrasarían al verano de 2024). Al margen de ello, ya sabe que estos tendrán que ser obligatoriamente diferidos. Además, el club necesita rebajar el valor de la transacción y aumentar los variables (que serían algunos de ellos de fácil cumplimiento) para encajarse en el draconiano Fair Play Financiero que exige Javier Tebas.
NOTICIAS RELACIONADAS
Solo será posible estructurar una oferta, que será seguro inferior a las hipotéticas del Arsenal y del Chelsea, con el ‘sí’ innegociable del delantero al Barça para pavimentar las negociaciones entre clubes. El Barcelona se sentará en la mesa pidiendo pagos fraccionados (que es un práctica habitual en el mundo del fútbol) y diferidos, y teniendo que rebajar obligatoriamente el precio de traspaso para aumentar los variables. Los ingleses, en cambio, están dispuesto a pagar al contado sin demasiados regateos.