La victoria momentánea del Barça en Getafe no esconde que hubiera dos decisiones arbitrales erróneas que perjudicaron gravemente al equipo azulgrana en la primera mitad: un fuera de juego mal señalado sobre Luis Suárez y unas manos de Sebastián Vergini que debían haber sido penalti.
Fuera de juego mal señalado
En el minuto 27, con 0-0 en el marcador, un pase en profundidad de Sergio Busquets hacia Luis Suárez dejaba al delantero uruguayo solo ante Guaita. Uno de los asistentes de Martínez Munuera señaló posición incorrecta del delantero, invalidando la jugada, pero la repetición muestra que el '9' del Barça partía en posición legal en el momento del pase.
Manos claras de Vergini
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Ocho minutos después, todavía con 0-0 en el luminoso del Coliseum Alfonso Pérez, el árbitro del encuentro volvió a ser protagonista. Una acción individual de Luis Suárez ante el argentino Vergini terminó con manos claras del defensa del Getafe al intentar frenar la progresión del 'charrúa'. La repetición de la jugada deja claro que Vergini tenía el brazo izquierdo muy separado del cuerpo y que tocó de manera deliberada el balón con el brazo. Por tanto, penalti no señalado a favor del Barça.