Que Ansu Fati es una pieza indispensable para este Barça es una evidencia irrefutable. El atacante formado en La Masia es el hombre con más gol de la plantilla. Tiene lo que se denomina en el argot futbolístico como 'duende'. Un imán que, obviamente, ni Xavi ni el barcelonismo quieren desperdiciar lo más mínimo. Y es por eso que esa ansiedad por verle de nuevo acumulando minutos y protagonismo en el verde es un riesgo enorme teniendo en cuenta su delicado historial de lesiones.
A sus 19 años el atacante de origen guineano ha pasado por un 'viacrucis' del que comienza a ver la luz, pero que obliga a mantener la alerta respecto a posibles recaídas o precipitaciones. Varias intervenciones en ese maltrecho menisco y el último percance muscular han activado un plan específico en los servicios médicos del club. Después de regresar en las semifinales de la Supercopa contra el Madrid y acumular ya 55 minutos (y demostrar por enésima vez cuánta falta hace sobre el verde), hay dudas sobre si Ansu tiene que ser de la partida frente al Athletic.
Ansu Fati, entre la necesidad de tenerlo y el riesgo de perderlo
| Valentí EnrichSENSACIONES
Por un lado, las buenas sensaciones del otro día y el hecho de que aguantara ese tirón de minutos (inesperado por el tema prórroga, por otro lado) empujan a pensar que perfectamente puede arrancar como titular el choque de octavos de final de la Copa del Rey. Es muy goloso verlo compartir once con Pedri, Ferran y compañía en este nuevo Barça rejuvenecido e ilusionante.
Por otro, lo que comentábamos acerca de la pertinencia de seguir un plan conservador y que vaya acumulando ritmo de partidos paulatinamente. Sin prisa. Obviamente las sensaciones del jugador serán importantes y, en ese sentido, Xavi ha arrojado algo de luz en rueda de prensa: "Veremos cómo está él físicamente, porque tenemos que dosificarle para no perderle más. Tiene estrella, gol, es capaz de marcar diferencias en cada partido. Es un privilegio tenerle ya, casi, al 100%".
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La idea es que el "privilegio" sea por fin duradero...