Un año de la resurreción del fénix Gavi

Hace un año, Gavi salía de Pucela cojeando y entre lágrimas. Hoy, 366 días después, el blaugrana sonríe después de atravesar una durísima travesía por el desierto. El fatídico 19 de noviembre de 2023 durante el intrascendente encuentro de la selección española frente a Georgia, correspondiente a la última jornada de la fase de clasificación para la Eurocopa, el de Los Palacios sufrió una rotura completa del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha y una lesión asociada en el menisco lateral.

El centrocampista del Barça acumulaba un alto desgaste con la selección española. A pesar de haber participado en los 26 partidos de la 'roja' desde que debutó con Luis Enrique, en la previa del partido, Luis de la Fuente reconoció que no creía conveniente que descanse. "Es hiperactivo, un superdotado físicamente, no quiere parar nunca, solo hay que verlo entrenar, por eso juega tanto y tan bien. Estamos en noviembre, en una época en que los jugadores tienen frescura y lo aprovecharemos. Los buenos jugadores no descansan nunca, por eso son buenos y especiales".

Pues bien, el riojano alineó como titular a Gavi frente a Georgia. La selección española tan solo necesitaba un punto para ser cabeza de serie en el sorteo de la Eurocopa 2024 y se medía a la penúltima clasificada. Un reto, a priori, fácil y propicio para dar descanso a los más habituales. De la Fuente no lo consideró así y el de Los Palacios arrancó de inicio. En primera instancia, Gavi recibió un golpe en la rodilla, trataron de aliviarlo con réflex y, en vez de sustituirlo, siguió jugando hasta que acabó de romperse la rodilla derecha. Un año de baja y adiós a la temporada por una negligencia de la selección española.

Once meses de recuperación

Así pues, Gavi y los servicios médicos del FC Barcelona se pusieron manos a la obra para recuperar al futbolista. No imperó la prisa. Máxima prudencia y el objetivo era que el '6' del Barça regresase en las mejores condiciones, no lo antes posible. La temporada ya estaba perdida y ya se enfocaban en el presente curso. Fue difícil poner freno al culé, a quien las ganas de regresar al verde le comían por dentro. El trabajo psicológico con un chaval de 19 años, también merece mención especial.

Tras once largos meses de recuperación, Gavi recibió el alta médica y entró en la convocatoria del Barça-Sevilla del 20 de noviembre, correspondiente a la 10ª jornada del campeonato liguero. Con el partido encarrilado con el 4-0, Hansi Flick le brindó la oportunidad de volver a sentirse futbolista. Además, lo hizo sustituyendo a su 'hermano' Pedri, quien le cedió el brazalete de capitán entre la atronadora ovación del Estadi Olímpic Lluís Companys de Montjuïc. Jugó siete minutos y el partido acabó 5-1.

Y ahora, ¿qué?

Un mes después de su reaparición, se cumple un año desde su lesión. Desde que volvió a vestirse de corto, Gavi ha jugado en todos los partidos que el Barça ha disputado hasta el momento: seis. En ninguno de ellos ha superado los diez minutos de juego, a excepción del partido en Belgrado ante el Estrella Roja, en que jugó 22 minutos.

Los minutos en el centro del campo están caros, pero en el vestuario, cuerpo técnico y dirección deportiva son conscientes de que Gavi es un pilar fundamental del Barça de presente y futuro. Casadó y Pedri se han ganado el estatus de fijos para Flick sin imprevistos de por medio. Gavi, Olmo y Fermín se juegan la tercera plaza de la sala de máquinas, con De Jong entrando y saliendo de la enfermería continuamente.

Durante este parón de selecciones, el tercero de la temporada y el último del año, evidentemente, Gavi no ha entrado en la lista de convocados de Luis de la Fuente. Ha aprovechado para desconectar en Andorra y seguir con su puesta a punto entrenando en la Ciutat Esportiva Joan Gamper. Ocho partidos más antes de que finalice el 2024. Ocho partidos más para que Gavi siga poniéndose a tono, recuperando sensaciones y ser importante en un equipo que le necesita.