El FC Barcelona se fue a la caseta con un empate sin goles ante el Atlético de Madrid. Lo mejor fue el resultado ya que Ter Stegen y el palo evitaron males mayores.
Ter Stegen, portero
Milagroso
El alemán evitó con el pie in extremis que entrara un remate a bocajarro de Hermoso. Se desesperó viendo la indolencia del equipo y como el Atlético se acercaba a su área con mucha comodidad. Sacó otra mano al borde del descanso a cabezazo de Morata.
Sergi Roberto, defensa
Tenaz
Fue de los pocos que entendió que el equipo debía salir y trató de estirar por la banda derecha para ganar profundidad. El Atlético apenas inquietó por su carril, volcando todo el juego por el costado de Junior.
Gerard Piqué, defensa
Abrumado
La presión del Atlético y la insistencia de sus atacantes lo llevó de cabeza y volvió a ver una tarjeta amarilla. Solucionó el trabajo con verdaderos apuros. Cabeceó al larguero en un saque de esquina.
Clement Lenglet, defensa
Práctico
Se dedicó a sacar los balones de cualquier manera y no contribuyó en la salida como otras veces. Notó la incomodidad de la ausencia de control por parte de la medular.
Junior Firpo, defensa
Tiritante
El partido le vino grande y cometió constantes errores. Sus faltas pudieron costar caras ya que dieron muchas acciones de estrategia al rival y se libró por los pelos de un autogol en un mal despeje que acabó en el palo de Ter Stegen.
Ivan Rakitic, centrocampista
Plomizo
No pudo con el alto ritmo del Atlético actuando de pivote. Acusó la falta de partidos y en la única llegada que dispuso, se quedó sin aire para el disparo.
Frenkie de Jong, centrocampista
Correoso
El holandés es pura voluntad, pero si el equipo no es capaz de tener la pelota solo luce defendiendo. Sus intentos de combinaciones murieron ante la asfixia rojiblanca.
Arthur Melo, centrocampista
Apático
No se le vio ni puso el interés que debe un partido de este nivel. Perdió un balón que no acabó en el gol de Herrera por los pelos. Estuvo muy frío e intrascendente en la elaboración.
Leo Messi, delantero
Responsable
Intentó bajar y buscar la pelota para sacar al equipo del atolladero. Aunque no estuvo del todo fino, su presencia ayudó a generar el mínimo peligro que tuvo el Barça.
Luis Suárez, delantero
Aguerrido
Nunca dejó de pelear para encontrar espacios y generó una ocasión con un disparo desde la frontal. Su ímpetu llevó al equipo a dar un paso adelante en los últimos minutos del primer tiempo.
Antoine Griezmann, delantero
Abucheado
Tuvo el mal recibimiento esperado por el Wanda y ni con este clima salió de su línea gris desde que llegó al Barça. Su desgaste fue sobre todo defensivo echando una mano al desafortunado Junior.