El 1x1 del Barça ante el RB Salzburgo

El peligro merodeó en todo momento sus inmediaciones y lo cierto es que el balón o acabó en la red o fuera de los tres palos. Hizo la estatua en se estiró sin suerte en los goles.

Muy metido en el partido desde el principio, pasó muchos apuros que solventó con anticipación y buena colocación. Le enmendó un error a de Jong y llevó por el camino de la amargura a Okafor.

Un central más en misiones defensivas y en la salida del balón, pero con poderío físico, y eso que estamos de pretemporada, para salir de excursión y darle más aire al equipo. Se confió en una acción que casi acaba muy mal.

Prueba de fuego para el francés, que se vio muy comprometido y lo pasó realmente mal en varias fases del partido. Suya fue la primera ocasión de peligro, pero no volvió a subir.

Intentó correr cuando pudo tomar aire, pero se mostró precipitado. Buena acción en un corte antes del descanso, mejoró en la segunda parte. Participó en el empate y salvó un gol.

Mucho trabajo en el centro del campo junto a dos talentos como Nico y Gavi que aún debe forjarse en partidos de intensidad. Físicamente se notó que está en rodaje, sobre todo en alguna carrera en la que no pudo alcanzar a los rivales.

En el interior también tiene muchas posibilidades, aunque su futuro esté en el mediocentro. Minutos junto a Busquets y de calidad que a buen seguro le irán muy bien. Probó la jugada individual y mostró carácter, aunque también cometió errores.

No pudo exhibir su gran talento como en otras ocasiones, pero lo intentó e incluso fue contundente en la recuperación. Hasta en las condiciones más complicadas es un futbolista interesante y con detalles.

Sufrió en defensa por la presión rival primero y un pase muy comprometedor de Lenglet después. Cuando se estiró, creó peligro, como en un centro-chut.

Se situó en punta junto a Memphis y tuvo alguna oportunidad, pero también muchos minutos en los que apareció poco. Demasiado interminente con el balón en los pies.

Memphis bajó en muchas ocasiones a buscar el balón, lo que le privó de más presencia ofensiva. Fue de más a menos en un partido complicado ante un rival muy rodado y aun así gozó de una muy buena ocasión, que salió fuera por poco.

Su entrada al césped es el ejemplo de quien se quiere comer el mundo. Una buena incursión y un destacado chut lejano de rosca fueron sus credenciales.

Le dio más frescura al centro del campo desde la posición de pivote. Con piernas para correr.

Jugó en defensa de tres centrales y después formó pareja junto a Umtiti. En todas las circunstancias se sintió cómodo y seguro.

Casi sin querer y de rebote, pero marcó un gol que le tiene que dar confianza.

Monopolizó el balón y el equipo mejoró con sus cambios de ritmo. Buenos minutos para el de Matadepera.

Sin problemas en minutos de mayor dominio azulgrana, el francés mantiene su progresión.

Se situó en el interior y volvió a evidenciar mucha calidad en la conducción del balón. Silbado por su pasado en el Rapid de Viena.

Sin apenas tiempo para mantener su racha goleadora, ha perdido protagonismo en los últimos minutos.