El Barça disputó un primer tiempo en el que le costó muchísimo empezar a carburar. De hecho, fue el Celta quien tuvo más el balón, la posesión, algo extraño en un partido disputado en el Camp Nou. Pese a ello, la pegada de sus delanteros decantó la balanza.
Arrancó el partido algo desajustado, con un nuevo sistema que tuvo que amoldarse con el paso de los minutos. Le costaba a De Jong, a Gavi, a Ferran, a Aubameyang... A Araujo, a Alves... Prácticamente a todos. Hasta que Dembélé se sacó de la chistera una jugada personal que acabó con el remate de Memphis a la red. Luego el holandés cedió para marcara Aubameyang. Un gran resultadod.
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Estas son las notas de los futbolistas del Barça al descanso:
Ter Stegen, portero
Granítico
La presión del Celta le obligaba a ejercer de último hombre y se hartó de jugar con los pies. Lo hizo con inteligencia. Galhardo le obligó a estirarse para evitar el gol. Lo hizo con solvencia.
Dani Alves, defensa
Pluriempleado
Actuó como tercer central, como lateral derecho y como interior. Un tres en uno que incluso se atrevió a atacar por el centro e intentar el disparo. Demasiado lejos, demasiado defectuoso.
Ronald Araujo, defensa
Impropio
Cometió un error grotesco, cediendo un balón flojo, mal y poco tenso a Ter Stegen que dejó solo a Aspas ante el portero. Eso sí, reaccionó rápido y corrigió impidiendo el disparo limpio del gallego.
Eric Garcia, defensa
Vitaminado
Corrigió, inició, dividió, subió y mejoró a sus compañeros. Fue de los pocos que entendió de que iba la película.
Jordi Alba, defensa
Apagado
Pareció cansado, gris incluso. Exhibió una versión discreta, alejada de la media que ofrece en cada partido. Ni chicha, ni limoná.
Frenkie de Jong, centrocampista
Desajustado
Sustituyó a Busquets y, arropado en parte por Gavi, buscó ser la correa de transmisión del equipo entre defensa y ataque. La correa necesita un apretón.
Gavi, centrocampista
Descentrado
Ejerció algo de doble pivote y algo de interior, pero, a la hora de la verdad, le costó ejercer de lo uno y de lo otro. Nunca se sintió cómodo.
Dembélé, delantero
Caótico
En el sentido más literal. Capaz de desesperar con su apatía y de levantar al Camp Nou con una acción llena de talento, velocidad y precisión, la que sirvió a Memphis para abrir el marcador.
Memphis Depay, delantero
Regular
A él le da igual que el Barça juegue mejor o peor porque su juego se sirve de sus propias virtudes. Combinó errores con aciertos, pero marcó su gol número trece de la temporada. Y asistió a Aubameyang.
Ferran Torres, delantero
Mundano
Una versión demasiado terrenal de un futbolista que necesita olvidarse de todo y ser él mismo, ajeno a todo lo que le llega a diario.
Aubameyang, delantero
Rematador
Una jugada lo resumió todo. Bajó a ayudar y se olvidó de ayudar cuando le devolvieron el balón. De espaldas es un jugador del montón. Necesita encarar portería. Cuando lo hizo, para adentro. Ahí no falla.