El meta internacional Gonzalo Pérez de Vargas, que disputará este fin de semana con el Barça la fase final de la Liga de Campeones en Colonia, comenta que en caso de victoria sumaría su cuarta Champions, la primera como capitán, pero recuerda que eso no le "quita el sueño".
"Solo quiero poder ayudar al equipo desde la portería y si la ganamos, disfrutarla", dijo el meta. Esta es su decimoquinta temporada en el Barça, solo superado por el extremo Aitor Ariño. Será su séptima presencia en la fase final, donde tiene tres Ligas de Campeones en su palmarés (2010-11, 2014-15 y 2020-21).
El rival del Barça en la semifinal será el THW Kiel alemán, "un equipo muy duro que intentará hacerse fuerte en defensa", por lo que los azulgranas deberán llevar el partido hacia su terreno. "Para ello debemos mantener la intensidad al máximo", dijo.
"Tienen un grandísimo portero, el danés Niklas Landin. En la final contra ellos en 2020 hizo una gran segunda parte (9 paradas), haciendo que su equipo ganara. Es un portero con una gran envergadura, muy ágil por su altura, sabe cubrir perfectamente los espacios. Lo ha ganado todo y su experiencia hace que sea muy complicado batirle", concreta.
Pérez de Vargas admitió que el Kiel tiene dos bajas importantes, como Pekeler o Sagosen, pero comentó que "éste es un deporte colectivo" y el Barça también tuvo este problema con la baja de larga duración de Ludovic Fábregas. "Sin él, fuimos capaces de jugar igual de bien", afirmó.
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"Este equipo merece el crédito por todo lo que ha hecho esta temporada y por lo que hizo el año pasado. Queremos hacer historia siendo el primer equipo que gana dos años consecutivos la Liga de Campeones desde que se implantó la Final Four", indicó el meta.