El bloque visitante empezó mandando en los primeros compases. El conjunto alicantino se adelantó en el marcador con una buena actuación de Cuartero y Jiménez y obligó al Barcelona a reaccionar. Los catalanes lo hicieron, como es habitual, sin contemplaciones. En diez minutos el anfitrión ya estaba por delante (6-5).
Dos goles seguidos de Gurbindo empezaron a distanciar a los catalanes, decididos a encarrilar definitivamente el encuentro. Los pupilos de Pascual firmaron un parcial de 5-0 (11-6, min.15) que dejaba claras sus intenciones. En defensa Saric no fue tan decisivo como en otras ocasiones.
El Benidorm no renunciaba tan pronto a dar la sorpresa en el Palau. Jorge y Javier Sánchez recortaban distancias (13-10) sin perder la cara al partido. La dinámica se mantuvo hasta la media parte: los azulgranas se escapaban con ventajas que rondaban las cinco dianas, y el Benidorm, sólido defensivamente, las estrechaba.
Pese a las buenas sensaciones al descanso (19-15), los pupilos de Fernando Latorre tuvieron serios problemas en la reanudación. El inicio del Barça, ahora con Gonzalo bajo palos, fue letal (26-19, min.40) gracias a sus contraataques y velocidad en la circulación. El técnico tuvo que parar el choque.
Hubo una reacción, tímida, y después siguió el monólogo visitante. En el minuto 50 la distancia alcanzó la decena de goles (33-23). El Benidorm acusaba el desgaste físico y no podía hacer nada frente a la efectividad de la primera línea de Xavi Pascual, con un Lazarov muy incisivo en este tramo del encuentro.
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En tareas de contención, Morros y Sorhaindo eran inexpugnables. Los últimos minutos solo sirvieron para certificar la superioridad del Barcelona y para dar minutos a los más jóvenes. El extremo Víctor Sáez firmó un gran final.