El seleccionador español de baloncesto, Sergio Scariolo, reconoció este lunes en rueda de prensa, tras llegar desde Berlín con el oro del Eurobasket colgado del cuello, que estaba “muy feliz de compartir todo esto con estos chavales que tanto se lo merecen”, aunque aclaró que “es el título más inesperado, no el más bonito”.
“No es el más personal ni el más difícil por la labor que hemos hecho” recalcó el entrenador nacido en Italia, que descartó la necesidad de reivindicarse después de conseguir el oro: “No me siento agotado, hemos ido teniendo mejores sensaciones conforme avanzaba el torneo hasta lograr la victoria final”.
“Ha sido un viaje muy bonito, lleno de imprevistos, de contratiempos, de preocupación, de esperanza, de ilusión, en el que nos hemos concentrado en el viaje, en el proceso, y ha sido lo más inteligente y lo más eficaz”, empezó Scariolo su intervención, explicando desde su sentimiento personal lo importante del camino a la victoria final frente a Francia.
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“Es muy raro partir del puesto 8 y acabar el primero, en cualquier deporte, hay que hacer bien el trabajo, coordinado con disciplina, orden, entusiasmo y alegría, mucha preparación y mucho espíritu competitivo, que nos caracteriza de forma casi identitaria, y gracias al trabajo de mucha gente, se nos reconoce como capaces para competir en situaciones en las que muy pocos pueden”, presumió el preparador español.