El Joventut pasó por encima del Lenovo Tenerife en el primer partido de cuartos de final de la Liga Endesa (100-68) en un 'show' de los locales que ridiculizaron a los tinerfeños, en una primera mitad de ensueño para los 9.000 aficionados que acudieron al Olímpic (54-21). Los jóvenes Busquets y Parra, los máximos anotadores con 14 puntos.
Los de Carles Duran salieron a 'comerse' al Lenovo, al que le recordaron su eliminación en la pasada Copa del Rey, en un partido desatado de los verdinegros, y nunca levantaron el pie del acelerador para endosar al cuadro de Txus Vidorreta una derrota de las que duelen, aunque solo signifique el 1-0 en la eliminatoria.
La primera mitad del Joventut fue de libro. Los verdinegros salieron como un ciclón, defendiendo en cada acción como si les fuera el partido, y cogió completamente descolocado a un Lenovo Tenerife, que no daba una a derechas.
Una Penya descomunal
Esa agresiva defensa, robando balones y reboteando para salir en velocidad, dejó a los de Txus Vidorreta incapaces de reaccionar. Un triple de Parra abría la renta a 10 en apenas cinco minutos (13-2) y la Penya ya no paró. Su juego estaba como poseído.
Solo un triple de Huertas fue todo lo que produjo el Lenovo en un primer cuarto descomunal de los locales, con un desbocado Andrés Feliz con dos triples consecutivos y la renta iba subiendo a velocidad de vértigo.
Vidorreta puso en juego a Shermadini, pero ni con esas. Lenovo era incapaz de igualar la velocidad de las acciones de los verdinegros ni mucho menos, su intensidad. Un 27-7 al final del primer cuarto marcaba la realidad entre ambos equipos.
Sin dar tregua
Aunque los de Carles Duran, lejos de sentirse satisfechos, siguieron apretando y el bochorno que hicieron pasar al equipo tinerfeño fue de los que hacen época. Más triples de Vives, Bassas y anotando todo lo que caía en manos de la Penya, llevó la renta a los 30 (41-11).
Si un dato podía definir lo que estaba sucediendo en el Olímpic era la valoración de ambos equipos: 55 para la Penya…¡menos 1 para el Tenerife!
El Joventut mantuvo esa intensidad con acierto en el triple (10 de 16) que acabó por machacar a los visitantes que vieron como se iban al descanso 33 abajo (54-21). Una paliza al descanso de las que hacen época. La duda es cómo iba a volver al partido el Joventut, complacido por lo realizado o con ganas de hacer más daño al rival.
Mantienen la tensión
Y no hubo duda. La Penya no quiso bajar el pistón y llegó a dominar de 38 puntos (75-37), llegando a superar la renta más alta nunca conseguida en un partido de play-off (111-74). Estaba claro que la voracidad del Joventut iba a mantenerla hasta el final, después de cerrar el tercer cuarto con +35 (78-43).
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Los aficionados del Joventut no querían que el partido se acabara nunca. Y es que posiblemente disfrutaron de la mejor exhibición verdinegra de toda la temporada, o quizá de los últimos años. Aún así, la diferencia final de +32 (100-68) solo sirve para encarrilar la eliminatoria (1-0). Seguro que el Lenovo les espera el sábado con muchas ganas.