El Joventut tuvo un fugaz paso por la Copa del Rey después de caer ante el Baskonia de manera justa, por 96-87 en un duelo que siempre estuvo en las manos de los vitorianos, y ante una Penya que no logró equilibrar nunca la intensidad de los de Dusko Ivanovic.El Joventut estaba avisado que el conjunto de Dusko Ivanovic iba a salir como una locomotora a toda máquina. Y Así fue. El cuadro vitoriano empezó con una marcha más que el Joventut, con una defensa agresiva, que la Penya no lograba igualar (16-6).
Las primeras ventajas fueron para los vitorianos ante un Joventut donde solo presentaba batalla Dimitrijevic. Muy pocas ideas en ataque, que permitieron al Baskonia mantener cómodas rentas de 10 puntos con un activo Henry (10), que les permitía acabar los primeros 10 minutos con 11 puntos de ventaja (28-17).
Más intensidad defensiva
Carles Duran pidió mayor intensidad a los suyos, y arrancaron con un poco más de agresividad defensiva, y acierto en ataque, especialmente del base estadounidense, Demetrius Jackson. Sus puntos (11) animaron al Joventut que llegó a acercarse a cinco (35-29).
Pero Duran decidió dar descanso a Jackson, y el partido volvió a manos del Baskonia, a pesar del despertar ofensivo de Tomic, con triple incluido, y los puntos de Brodziansky (7).
Un triple de Dawson reducía la diferencia a ocho al descanso (55-47) dejando la puerta abierta al Joventut, a pesar de haber jugado por debajo de sus posibilidades, especialmente en ataque.
Sin reacción tras el descanso
El duelo no cambió los biorritmos de la primera mitad, con un Baskonia que tuvo a Giedraitis como protagonista ofensivo, llevando a una máxima de 13 a los vitorianos (64-51). El ataque de la Penya no era fluido, ni tampoco lograba frenar a los vitorianos en defensa.Ferran Bassas lo intentó con cinco puntos consecutivos (68-61), y un nuevo arreón del Joventut les acercó a seis (71-65). Pero un triple de Polonara y una técnica a Carles Duran, le devolvía la renta al Baskonia (75-67) que la ampliaba a 10 al final del tercer cuarto (78-68).
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El arranque del cuarto final acabó por hundir a los verdinegros, que parecían definitivamente fuera mental y físicamente. Un parcial de 9-0 para los de Dusko Ivanovic, les dio la mayor renta del partido (87-68). El Joventut volvió a intentarlo (91-84), pero se quedó sin tiempo para la remontada y el duelo tuvo un justo ganador (96-87).