El 1 de septiembre entra en vigor el nuevo ciclo de homologación de consumo y emisiones WLTP, que pretende controlar con mayor rigor ambos aspectos y ofrecer unos datos más realistas que el NEDC, utilizado desde 1980.
A partir de la fecha, todos los coches nuevos en Europa deberán cumplir la normativa según el ciclo WLTP. Con este cambio, el sector prevé un aumento medio del 6% de las emisiones en un mismo vehículo al cambiar de ciclo, por lo que los exentos de pagar el impuesto de matriculación, podrían verse forzados a hacerlo con el cambio.
El cambio de ciclo representa un desafío para todas las marcas. En este sentido, Volkswagen planea parones sistemáticos de la producción en su planta alemana de Wolfsburgo, donde fabrica el Golf, el Touran y el Tiguan, para hacer frente al cambio.
Herbert Diess, presidente del Grupo Volkswagen, ha afirmado que el corto tiempo del que dispone la marca para “probar más de 200 variantes de modelos y hacer que las aprueben” obligará a detener la producción. La marca, de hecho, ya se encuentra discutiendo con los trabajadores de la fábrica para acordar las fechas y la duración de los parones.
Los cierres sistemáticos de la fábrica serán entre los meses de verano y septiembre con el objetivo de que no se aglutine un número elevado de vehículos. La empresa ha asegurado a sus trabajadores que serán notificados tan pronto como queden definidas las fechas exactas.
Aunque Volkswagen intenta que estas medidas afecten lo mínimo posible a sus trabajadores, desde el comité de empresa apuntan a la falta de planificación y de trabajo desde que se conoce que habría que intervenir antes del 1 de septiembre.
"No es culpa de nuestros compañeros que la compañía haya construido muy pocas plataformas de prueba y de repente no pueda manejar el volumen de prueba requerido. Nuestros compañeros no son responsables de esta situación", dijo Bernd Osterloh, presidente del comité.
NUEVA NORMATIVA
El directivo ha asegurado que, tras estos periodos, empezarán a entregar los vehículos que cumplan con la normativa según el nuevo ciclo y que la compañía se pasará las 24 horas del día probándolos. Sin embargo, ha admitido que muchas unidades tendrán que ser almacenadas hasta que se aseguren de que se ciñen a los requisitos.
“Después de las vacaciones de verano, en Wolfsburgo solo fabricaremos vehículos que cumplan con los nuevos estándares. Los vehículos se entregarán paso a paso y tan pronto como estén disponibles las autorizaciones requeridas”, expresaba en el comunicado.
NOTICIAS RELACIONADAS
El anuncio llega días después de que Porsche dijera que ha dejado de aceptar pedidos personalizados de todos sus vehículos en Europa para prepararse para la implementación del ciclo WLTP.