Era una cuestión de tiempo. Estaban condenados a entenderse porque los buenos futbolistas siempre se entienden. Y ha tardado en ocurrir, pero ya se puede decir que Antoine Griezmann y Joao Félix hacen migas.
Era la delantera con la que soñaban en el Wanda Metropolitano desde que el Atlético anunció el regreso a casa del Principito después de su paso por el Barcelona, donde el francés nunca será recordado. Pero por una cosa o por otra (lesiones, baja forma de uno o de otro, etc.) casi nunca coincidieron sobre el campo hasta que en este último mes Simeone se atrevió a ponerlos juntos y el experimento, qué cosa, funcionó.
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Desde que Griezmann volvió de su lesión y compartió delantera con Joao Félix el Atlético ha disputado tres partidos y ha ganado los tres: Cádiz (2-1), Manchester United (0-1) y Rayo Vallecano (0-1). La dupla francoportuguesa es el salvavidas al que se agarra el Cholo para amarrar la cuarta plaza de la tabla en las nueve jornadas que restan y soñar ante el Manchester City en la Champions, donde Pep Guardiola ya les está esperando.