Un imperial Nick Calathes (25 puntos su tope anotador en el Barça) lideró a los azulgranas hacia una angustiosa victoria en Santiago. El Obradoiro vendió muy cara su piel y solo hincó la rodilla con el bocinazo final. Eso en el día en que, por cierto, Thomas Heurtel volvió a contar en la rotación de Sarunas Jasikevicius.
Durante el primer tiempo, el Barça fue a contracorriente (solo dos mínimas ventajas en los primeros veinte minutos) ante un Obradoiro duro atrás y que lo tuvo claro. Bien buscar doblar el triple para sus tiradores o apostar por el juego interior con el lituano Birutis, una de las sensaciones de la Liga. El plan salió a medias porque Birutis cumplió ofensivamente pero se cargó con tres faltas en el primer cuarto.
El Barça, que llegó a perder por 7 puntos (11-4 y 31-24) tuvo que crecer atrás y ponerse en manos de Calathes, de un incisivo Heurtel y de la pelea de Davies bajo los aros oara reconducir su devenir (39-37 al descanso).
Tras el paso por los vestuarios, el conjunto de Jasikevicius -en el que por cierto Oriola apenas jugó dos minutos- se fue hacia arriba con un Mirotic trabajador (8 puntos y 9 rebotes) y un Calathes preclaro en ataque. Enfrente, el Obradoiro se ofuscó y cuando se dio cuenta iba diez abajo en el marcador, diferencia con la que se llegó al final del tercer cuarto (51-61).
La tarea parecía encarrilada pero el Barça volvió a las andadas. Malos ataques y dudas atrás permitieron a los gallegos meterse en el partido de nuevo (65-65). Para entonces, tras muchos minutos, Birutis había vuelto a la pista y el Obradoiro lo tuvo claro: balones en ataque para el gigante lituano.Y el duelo se encaminó a un desenlace a cara o cruz.
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Con 75-78 Serapovic desperdició su primer tiro libre y tiró a fallar el segundo. La bola le fue a parar a Alvaro Muñoz quien lanzó un triple que erró a 2”. Los colegiados revisaron la jugada ya que Mirotic había tocado el balón cuando éste descendía. Pero comprobaron que la trayectoria del mismo no iba encarado a canasta (de hecho se había quedado corto) por lo que anularon la jugada. Otro triunfo sudado para el Barça.