45 Aniversario

Súper Epi, el primer gran ídolo de la afición del Palau

El alero azulgrana desarrolló toda su carrera deportiva profesional en el Barça donde jugó durante 19 años siendo la referencia del club en una exitosa etapa de la sección

Juan Antonio San Epifanio sigue siendo una referencia en la historia del Barça de basket / FCB

Ramon Palomar

 Corría la década de los 80, una época en la que el baloncesto comenzaba a ganar terreno en un país donde el fútbol dominaba, y donde los aficionados empezaban a soñar con un equipo de baloncesto que compitiera al más alto nivel. El Barça, a través de su sección de baloncesto, se encontraba en ese proceso de transformación.  

Cinco años después de su llegada al Barça, en 1979 de la mano de su hermano Herminio, Epi dio el salto al primer equipo. Fue el técnico yugoslavo Ranko Zeravica quien confió en sus cualidades. En ese año también debutó con la selección frente a Cuba en Móstoles.

En el Barça coincidió con una gran generación de jugadores como Solozábal, Sibilio, De la Cruz y Audie Norris con los que consiguió acabar con la histórica hegemonía que el Real Madrid  había ostentado en el baloncesto español, llegando a hacer del Barcelona uno de los mejores conjuntos de Europa de los años 80.

La llegada de un joven Epi al Barça causó un impacto inmediato en el equipo azulgrana / FCB

Toda una vida en el Barça

Con el Barcelona llegó a conseguir, tras 19 años de profesional, un impresionante palmarés con 21 títulos de primer nivel, entre los que se incluyen 7 Ligas ACB y 10 Copas del Rey. Solo le faltó por conseguir el título de campeón de la Copa de Ruropa pese a que disputó diversas Final Four y en tres ocasiones la final.

Epi contó con compañeros míticos como Nacho Solozábal o Audie Norris / FCB

Su tiro de media distancia se hizo famoso, y su personalidad en la cancha reflejaba la pasión de un joven que entendía lo que significaba vestir los colores del Barça con humildad, el esfuerzo y el amor por unos colores.

Pulsa para ver más contenido para ti

En el 1990, Epi decidió retirarse del baloncesto profesional, dejando tras de sí una estela de victorias, títulos y recuerdos imborrables. Su legado perduró no solo en los trofeos, sino en el corazón de cada aficionado que coreó su nombre en el Palau y lo sigue teniendo como referencia del basket blaugrana.

Pulsa para ver más contenido para ti